La excusa: Activar la Visa

Septiembre 2009: Nos llegó la visa. “Tiempo límite de activación: 03Jun10”. Caray… tenemos 8 meses para decidir cuándo viajar…. Y apenas hace un mes conseguí este empleo… ¿me irán a dar permiso de tomar mis vacaciones antes? ¿Y cómo les digo que voy a activar una visa australiana si cuando me contrataron no les dije nada de que me iba a alguna parte…? … Bueno, es que hasta ahora no me voy… Hata que Eloy no le dé el permiso a JC, no me voy…

Noviembre 2009: (En el avión a Londres): … Si Elizabeth (jefe 2) es que tu sabes que yo estoy metida en un paquete para irme a vivir a Australia y estoy esperando a que me la aprueben… Y bueno… lo que pasa es que el papá de mi chamo no me quiere dar el permiso y por eso no me he ido pues… (La cara de mi jefa era: ojos azules pelaos y voz de susto) – Bueno Adriana, avísanos con tiempo para poder actuar… Este… pero te quedas ¿no? Es que nos costó mucho conseguir a alguien adecuado para este puesto…

(En el McDonalds de La Trinidad, en reunión con el papá, unos días después): Dios GRACIAS!!! Si no fuese por tu mano divina, este hombre nunca daría su brazo a torcer! … Mi nené va a tener visa de residencia!!!!! Tengo que comenzar cuanto antes esto… Pero qué hago primero, saco la visa de JC o saco visa de turista primero para que se venga con nosotros?? Eloy me dará permiso para llevármelo de vacaciones…? Ay Dios… con mis antecedentes, capaz y se niega… Voy a esperar un poco antes de pedirle TAMBIÉN el permiso para viajar…  Y de paso, ¿cómo le digo a los jefes?

Diciembre 2.009: Rodrigo, que tiene todo lo metódico que yo no tengo, comenzó a buscar por agencia de viajes, por www.despegar.com y directamente en aerolíneas el mejor precio, semana por semana de esos 8 meses. No exagero! Buscó semana por semana! Y la agente de viajes soy yo… JA JA JA! Lo positivo es que ya sabemos qué empresa podemos montar!

Luego de analizar el precio de los vuelos por Argentina o Chile (que son los más caros y los de peor servicio), los precios por Europa (baratos pero subía con el hecho de tener que quedarse una noche en cada parada… Sin contar los LAAARRRGGGGOOO de este viaje), los precios por USA (súper accesibles, pero la visa lo obstaculizaba todo… soy una negada a sacarme esa visa) y los de una ruta totalmente desconocida: Vía Canadá, decidimos por esta última. ¿Por qué? Porque era la segunda más económica después de USA, porque la visa que teníamos que obtener (solo JC y yo porque Rod tiene multientrada) era la de tránsito y era mucho más sencilla de obtener y sin costo y porque la embajada de Canadá suele dar las visas el mismo día.

El mejor mes: Abril o Mayo. Era la época en la que las aerolíneas en general daban los precios más bajos. Nos decidimos por Mayo, así que mi esposo fue directo a Air Canadá con sus números de vuelos (escogidos por él) y compró nuestros boletos, los cuales salieron en aproximadamente 5.800 BsF c/u con impuestos incluidos. Esto fue pre-devaluación (gracias a Dios). Pero todavía nos faltaba un boleto: El de JC. Obviamente quería llevarlo conmigo para poder mostrarle adónde quería llevarlo y ahora más que su papá había dicho que firmaría el permiso de visa, pero por algunos antecedentes, temía que el papá me dijera que no me dejaba llevármelo de vacaciones y tuviera que pagar alguna penalidad por anulación de boleto, por lo que no lo compré en este momento. Esperé a poder hablar con él para comprarlo.

Enero 2.010: Dios mío le estoy dando demasiada larga a dos asuntos que necesito resolver ya… Ya tengo mi boleto en mano y ni el jefe sabe que me voy ni Eloy sabe que quiero llevarme a JC. Primero hablo con Eloy.

Hablando con Eloy: Gracias DIOS!! Ahora a moverme para comprar el boleto (next day: Devaluation time…).

Si. El boleto de JC salía en 9.000BsF. Absurdo, si; salía más caro que el nuestro.

Febrero 2.010: AdrianatienesquehablarconeljefeAdrianatienesquehablarconeljefe…

Marzo 2.010: Ok… hoy es el día. Si no me dan el permiso, renuncio. Es más importante el futuro que esto. Si sigo alargando, no me va a dar tiempo de sacar la visa a JC. Total, ya no da tiempo de que le aprueben la residencia antes del viaje, asi que le saco la turista ahora y cuando regrese empiezo el proceso pesado. “Un paso a la vez”.

Hablando con el jefe: Bueno Livio (jefe 1)... Cuando tu me contrataste, este proyecto estaba parado, pero ahora va a arrancar y bueno... Me voy. NO! Este año no!... Me falta todavía darle la visa a mi chamo y bueno... estaría yendome el año que viene si Dios Quiere... no, aún no tengo fecha... pero si necesito pedirte permiso para tomar mis vacaciones antes de cumplir el año aqui porque tengo fecha límite de entrada para activarla el 3 de Junio o sino me la quitan =S SI!? GRAAACIAAASSS!!
gracias DIOS!!! Este empleo me cayó como anillo al dedo… Practico mi inglés y de paso mi jefe es un sol!!! Un verdadero ser humano!!! Australia nos vemos en Mayoooooo!!!!

Esta vez mi agenda Astrolunar tendrá una función de verdadero peso, más allá de ver las lunas: ORDEN!!! Anotar por dónde empezar.

1 día después: Cooorrreee a reunir los papeles de JC para la visa de turista!!! Corre más rápido, envíalos!!!!

Oh Dios cuantas semanas de espera para que le den la visaaaa!!!

Abril 2.010: LE DIERON LA VISAAAAA!!! Cooorrreeee a reunir los requisitos para la visa de tránsito de Canadá!!! COOOORRREEEE  para la Embajada de Canadá!!

Nooooo por qué justo hoy la impresora de la fucking embajada tiene que dañarse??? Dios mio y no pueden decirme si me la otorgan o no????

3 días después: NOS DIERON LA VISA DE TRANSITOOOOO!!!

8 de Mayo de 2.010: AUSTRALIA ALLÁ VAMOOOSSSS!!!! 

Lo que no debí hacer... E hice... Y estoy volviendo a hacer!!

Si… Si no quieren pasar amarguras, lo mejor es no esperar nada. No crearse ilusiones.

Mi vida se volvió un desastre ese 2.008. Estuve a punto de perder mi matrimonio por un comportamiento tan absurdo y por muchas palabras hirientes; tenía a mi hijo prácticamente abandonado; y tenía a toda una familia reprochándome las dos cosas, situación que, con mi personalidad, lo que hace es que haga más lo que no le gusta a los demás (otro error).

En Octubre del mismo año yo misma me cacheteé y decidí asumir mi culpa. Hablé con mi esposo para pedir disculpas y a pesar de que en ese momento las aceptó, muy luego entendí que ya era tarde. Mis intenciones de seguir adelante eran reales, sin embargo el hecho de pensar en que me tocaría quedarme TODA LA VIDA en este país y no poder brindarle a mi niño lo que necesitaba y quería, tan solo por UNA persona, no me dejaba avanzar. Estaba realmente molesta con el mundo y en actitud apática y conformista.

Así pasó casi un año y un día ya cansada de la tortura mental que significaba pensar en que mi esposo se iría y hasta allí llegaría todo, un 18 de agosto de 2.009 me fui corriendo de la oficina a la iglesia luego de muchos años sin pisar una y allí me senté, durante 45 minutos más o menos, a preguntar solo POR QUÉ. Por qué me quitas esto, por qué me diste lo que no quería, por qué me mantienes en este país, por qué no me ayudas con Eloy a que firme ese permiso, por qué me odias??? Qué es lo que pasa para que me tranques tanto los caminos??? … Y por supuesto Dios no se apareció en ese momento a decirme nada, así que me fui. Pero al día siguiente, supo darme la respuesta a través de un descubrimiento, un golpe durísimo a mi vida me enseñó que todavía tenía muchas cosas que resolver y luego de (nuevamente) armar el escándalo hasta el punto de “llamen a una ambulancia que está en crisis” y una noche de delirios (en serio), decidí que tenía que asumir las cosas seriamente. Desde entonces la vida se abrió (en orden): Conseguí un empleo en el que practico inglés (al menos escrito) a diario; al mes, exactamente el 17 de Septiembre de 2.009 FINALMENTE!! A mi esposo y a mí nos dieron la visa; y lo más hermoso de todo: En Noviembre de 2.009, el papá de mi hijo decidió darme el permiso para la visa!!!!!!!

Por eso cuando preguntan DIOS EXISTE? Yo digo, SI. Dios, “ElUniversoConspira”… Llámenlo como quieran, pero si hay algo más allá que está presente, viéndonos y quiere que estemos REALMENTE BIEN y a diario le doy gracias por todo.

Como podrán imaginar, el aprendizaje de dejar los dos pies en la tierra donde vives aún sigue siendo una lucha diaria jejeje. Hoy en día, los documentos para la visa de Julio C. están en el DIAC (cumpliendo 1 mes  y un día) y no paro de leer blogs, buscar personas que ya vivan allá, ver casas, ver fotos…

Pero de todo esto también me quedaron otros aprendizajes:

Ser comunicativa, es realmente importante en la vida a todo nivel. Aún me cuesta, pero al menos lo intento.

Más nunca forzar las cosas. Esto lo que trae es el efecto contrario a lo que quieres.

Nunca abandonar a tu familia; ellos nunca tienen la culpa y son los que más pagan. Es mejor intentar no hacer eso.

Ser paciente, perseverante… Aunque a veces provoque tirar la toalla. Tírala, pero no tardes en recogerla. Siempre habrá un momento en que las puertas se abren.

Hay que aprender a toda costa a no perder el control ante grandes problemas! Yo soy especialista.

SIEMPRE ESTAR BIEN CON DIOS. De lo contrario, te va a hacer ver las cosas de uno u otro modo!! Y es mejor cuando no duele!

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Lo que no debemos hacer... y hacemos!!

…Y creo que es muy difícil -por no decir imposible- dejar de hacer. Se trata de vivir el “hoy y el ahora”, así, con ese tono de autoayuda y de “acabo de salir de mi reunión de "Australiálicos Anónimos”.

Cuando comenzamos un proceso como este,  empezamos a vivir una transición. Un sueño que vemos lejano comienza paso a paso a hacerse realidad y aunque queramos mantener la calma y vivir la experiencia sin adelantarnos a los hechos, siguiendo nuestras vidas como si no hubiera plan, se hace imposible no mudar al menos un pie al futuro. Agréguenle que la situación en la que vivimos, que pienso es la situación de la mayoría de los jóvenes profesionales de este país, en la que no vemos que nuestras metas de independencia y un buen futuro puedan darse como debería ser en la vida… Créanme que eso puede llevarlos a olvidarse del presente.  Y aquí cabe la tan sonada frase de John Lennon: 

La vida es aquella que pasa mientras estas ocupado haciendo planes.

Para explicar este post, como siempre, me remito a una anécdota personal.

Cuando nosotros comenzamos este proceso, lo hicimos como todos: llenos de dudas y como unos bebés aprendiendo del mundo, curioseando todo. Lo primero que hice fue decirle al papá de mi hijo que tenía en mente emigrar y que las opciones eran Canadá y Australia, pero que lo más seguro era lo segundo. El dijo un escaso “está bien, nada más coméntame del proceso” y hasta ahí quedó. La verdad los primeros pasos fueron bastante fáciles y rápidos en nuestro caso, lo que hizo que los primeros 6 meses nuestra esperanza creciera de 0 a infinito y siendo mi sueño desde hace años salir de Venezuela, empecé a dejar de vivir mi vida aquí mentalmente.

Comencé a ver casas en Adelaide, a ver las páginas de empleo, a meterme en cuanta página web encontrara de fotografías de la ciudad, del país… comencé a leer sobre la geografía, economía, política de Australia, a buscar colegio para mi hijo… Empecé a contactar venezolanos que ya estuvieran en esa ciudad, aprovechaba mi trabajo para buscar precios de boletos aéreos… Incluso presionaba a mi esposo diciéndole “deberíamos ir pensando cuándo poner el carro en venta”.  Mi mayor ilusión era darle a mi hijo YA! un sitio para él. Nosotros no tenemos una casa propia y aún dormimos los dos en el mismo cuarto, cosa que para ninguno es cómodo.

Ya me veía allá y por ende, dejé de vivir el presente. Dejé de hacer cosas, pensando en “cuando esté allá haré esto y aquello y Julio podrá hacer esto y aquello y Rodrigo podrá hacer lo que siempre ha querido” y lo mismo pasaba cuando hablábamos entre nosotros. Todo era “Cuando estemos allá...”… pero el aquí, en Caracas, no pasaba nada. Nuestra vida estaba basada en Australia, en un futuro que aún ni siquiera sabíamos si sería pero la ilusión nos decía que ya era. Mi vida era allá, mientras tanto aquí actuaba casi por inercia.

Pero algo me decía que habría un obstáculo y alargué mucho tiempo el resolverlo: El papá de Julio C. Yo nunca he sido una persona muy comunicativa y eso me costó caro.

Desde aquella vez que le comenté sobre el plan de emigración, más nunca volví a decirle nada. Pasó un año y llegó el momento de su firma en el documento que le daría permiso a Julio C de tener su visa. Pasó un mes antes de que me atreviera a decirle nada y cuando lo hice, su respuesta fue una gran cara de sorpresa y un “tú no me dijiste nada del avance de esto” y un “tengo que pensarlo”. Nuestra relación estaba rodeada siempre de mucha tensión y yo, la maestra de la presión, trataba todos los días de preguntarle si lo había pensado y su respuesta siempre era evasiva. Me estalló un cólico nefrítico, fui operada y mandada de reposo en medio de esa situación, que hizo que me amargara mucho más. Pasaron dos meses infernales desde que le dije y un día que se había llevado al niño y que le había pedido que lo llevara temprano a casa, no lo hizo y mi paciencia llegó a su límite (mucho había tardado, mi mayor defecto es que tengo 0 paciencia): fui hasta donde estaba y se armó el escándalo. Gritos, pelea muy fuerte, intermediarios para evitar algo peor y hasta una amenaza de llamar a la policía para llevarme detenida, fueron el preámbulo al gran NO VOY A FIRMAR UN CARAJO. Bueno… al menos ya tenía una respuesta.

Desde ese día no paré de llorar. Mi vida se derrumbó, me sentía perdida… me habían arrancado la vida, pues estaba TOTALMENTE basada en ese sueño. Me descontrolé por completo y llegué a ser alguien que jamás en la vida había sido: rumbeando de lunes a lunes, tomaba bastante y no estaba pendiente ni de mi, ni de mi pareja, a quien le decía que se había terminado todo porque él no estaba obligado a quedarse encerrado en un país como este, ni de mi hijo, que como todo niño necesita a mamá. 

Toqué fondo, y no se imaginan cuán PROFUNDO! llegué.

A pesar de las muchas distracciones, al final del día terminaba como siempre: llorando a moco tendido y molesta con Dios (como desde hace años) preguntándole qué COÑO había hecho para que siempre me pusiera un PEÑÓN en el camino. Un buen tiempo pasó antes de saber la respuesta (next post).

Y Así aprendí, entre algunas otras cosas, que tener los pies fuera de la tierra en la que estas hoy, no trae cosas buenas. 

Bolígrafo, firma y… Acción!

“Alo Eugenio? Hola te llama Rodrigo Pinedo, tuvimos una entrevista contigo hace unos días… bien bien y tu? … Me alegro… Bueno te llamo porque mi novia y yo hemos hablado y decidimos firmar el contrato, entonces… cuándo podemos vernos?”

El resto fue tener el bolígrafo y el papel en frente, suspirar hondo y… plasmar la firma.

No les voy a hablar de documentación y papeleo, porque les confieso que, por algunas razones que son harina de otro costal, mi esposo fue quien se encargó del 99% del recaudo de documentos y requisitos, así que mi relato sobre esto sería tan escueto como lo que consiga en mi memoria (la cual falla desde que traje al mundo a mi pequeño retoño, es decir, hace 7 años). Lo que si les puedo contar, es acerca de lo que percibí, bueno y malo, durante nuestro proceso.

Lo bueno:

Nuestro asesor.

La verdad es que Eugenio es un buen asesor. Cada cosa que le preguntábamos, nos la respondía con claridad y lo que no, pues lo averiguaba y luego nos daba la respuesta.

La fluidez en la solicitud de papeles necesarios, sobre todo al principio del proceso. La verdad gracias a eso, cuando llegó el momento de entrar a migraciones, no nos quedaba más nada sino los exámenes médicos.

El orden de mi esposo. Entre tanto papel, creo que hubiera sido yo la aplicante principal y la encargada de buscar y organizar papeles y aún estaría por la primera fase…

Lo malo:

La Case Manager.

No podía dejar de decirlo. Esta chica tenía un serio problema con la contestación de correos electrónicos y hace poco ya había llegado incluso a no atender el teléfono, a mandar a decir cada vez que la llamaba “tiene la línea ocupada”. Ya a la cuarta le dejé el número y no tuvo la delicadeza de llamar de vuelta.

Además, daba información errónea.

De paso, se daba el tupé de contestarle al cliente que le escribí y le escribía correos porque no recibía respuesta, ese que esta pagando 6000 dólares que ya no sé si son americanos o australianos, y que los pagó porque le ofrecieron un servicio de primera, que “el tiempo de contestación de correos era de 4 días hábiles y que para entonces le mandaría un correo con la información solicitada”. Es decir, que si estaba en su computadora sin hacer nada pero con un correo pendiente del día anterior, ella no lo contestaba porque… no habían pasado 4 días hábiles???" Se podrán imaginar el momento… Allí comenzó mi “odio” hacia ella (porque antes era “incomodidad”).

Lo que hizo que mi corta paciencia y poca diplomacia llegara a su límite (y me disculpan si ya esta pasando esto de post a descarga) fue lo siguiente: Por razones que en este post no vienen al caso, tuve que sacar a mi hijo del proceso. Lo informamos a esta chica en un momento y vía telefónica, nos comentó que no nos preocupáramos, pues cuando el papa de JC decidiera dar el permiso, el otorgamiento de visa sería muy económico, alrededor de los 500AUD.  Esto fue lo que hizo que decidiéramos continuar el proceso a pesar de, así que el expediente entró en migraciones sin los documentos del pequeño.

Ya habían pasado varios meses desde que entramos a migraciones (no recuerdo si de hecho ya había pasado un año) y no teníamos noticias… era realmente preocupante. Así que mi esposo decidió llamarla por teléfono y allí fue cuando se le ocurrió preguntar qué pasaba…! Como a las 2 semanas, llamó diciendo que el Case Officer SOLO necesitaba una carta explicativa del por qué habíamos sacado al niño para terminar de estampar la visa en nuestros pasaportes… Es decir, pasamos quién sabe cuánto tiempo esperando sin necesidad.

Hicimos la carta y al mes, nos aprobaron la visa (a mi esposo y a mi).

Más tarde, cuando el papá de mi chamo decidió otorgar el permiso, recibimos la “gran” noticia de que serían 3.600AUD más y por supuesto como la información que nos dio no estaba por escrito, no hubo forma de demostrar su error y los locos fuimos nosotros. El correo que envié no fue NADA formal.

El tiempo de otorgamiento no es igual al tiempo que ofrecen. Pero ya esto sale de sus manos, aunque podrían ser más sinceros.

El tiempo no se cumple, pienso yo, debido a que la política y las legislaciones en Australia son muy dinámicas, por lo que año tras año hacen una cantidad de cambios que afectan a cada expediente de manera distinta.

En nuestro caso, nos vimos afectados en una oportunidad positivamente, pues empezaron a darle prioridad a las visas regionales y en otra negativamente, porque la ocupación en la que Rodrigo había hecho la reválida, había salido de la lista. Gracias a Dios, había otra ocupación en la que podía hacerla, así que solo tuvo que volver a pedirla y al cabo de un mes fue aprobada.

La realidad, en nuestro caso, fue de 2 años y medio, posiblemente por los retrasos por cambios mezclado con la negligencia de la CM y el tema de mi chamo.

Si… Creo que esto es todo lo que puedo decir en este post. 

Pa’lla, Pa’ca… no, mejor Pa’cullá

Entonces… Nos sentamos, ya cansados de andar divagando por la vida esperando una oportunidad. “Pensemos en lo que nos gusta: un país serio. Que casi no se nombre en las noticias, al menos que sea porque se queman unos pinos o porque un tiburón mordió a alguien. Un país con proyecciones muy positivas en este mundo loco. Un país abierto a la inmigración. Un país que nos permita una vida EN PAZ”. Conclusión: Canadá o Australia.

Antes de decidirnos, acordamos ir a ambas conferencias: Una de SEDAV y otra de VEA. Por todos es sabido que estas dos asesoras tienen años viniendo a Venezuela, por lo que no nos esforzamos en buscar alguna otra. Con SEDAV lo que hicimos fue pedir directamente la entrevista, la cual era gratuita. Allí conversamos con el asesor y creo que el hombre es pro-franchute, porque a todo el mundo le recomienda irse por Quebec. Aplicante principal: yo, vaya usted a saber por qué. Lo único que percibí del hombre era que quería dinero, porque lo único que decía era “Quebec Quebec,  vamos vamos!” y no explicaba nada… En serio, me cayó mal el tipito.

Con VEA, a pesar de haber sido primero una conferencia con mucha gente (MUCHA), la sensación fue distinta. Fue una presentación completa y donde sinceramente te motivaban a averiguar si Australia te quería. Ok, pidamos la entrevista personal (que por cierto fue un lindo 14 de Feberero... ¬¬ qué nulo). Fuimos y los puntos nos daban para la Visa SIR patrocinada por South Australia, si Rodrigo, mi esposo y quien en este caso sería el aplicante principal, trabajaba un año más.

Nos fuimos a casa y otra vez a analizar pros y contras de cada destino, los cuales suelen ser los mismos que los del resto de los paisanos: Canadá muy frío pero cerca, Australia más tropical pero botado. A esto, agregamos que para Canadá el proceso era más engorroso por el Francés (si nos íbamos por Quebec) o por los tiempos (si nos íbamos por la parte federal y basados en lo que nos informaron en la entrevista con VEA, que el tiempo para obtener la Visa SIR era más o menos de año y medio), además Canadá pedía más papeles.

En nuestro caso, Canadá tal vez hubiera sido un poco más conveniente por el hecho de que Rodrigo tiene familia Canadiense en Ottawa y para mí debido a la cercanía, por el papá de mi hijo, sin embargo, debido a los pros nombrados arriba y a nuestro total espíritu aventurero (aunque ahora soy un poco… asustona por decirlo lindo), nos decidimos por un país prácticamente nuevo, creciendo a mil por hora, con proyecciones excelentes, del cual solo se escucha su nombre en las noticias cuando un tiburón aparece o cuando algún genio hace algo beneficioso para el mundo (o por lo que vi hoy, cuando una animadora se pela al anunciar a la ganadora del next top model en vivo, Véase aquí), donde hay animales RAAAAROS y habitan también los 10 más venenosos del mundo… Un país ícono del modernismo. Ese que queda alláaaa abajo, al Oeste de Argentina, donde pareciera que se volteara el planeta como un disco de Acetato. Una islota con 4 estaciones pero de gente tropical y feliz, abierta a su multiculturización… En fin… tantas cosas que se pueden decir de AUSTRALIA…

Así que desde entonces, estamos esperando que nos abran los brazos para recibir a tres loquitos que desean vivir y trabajar para su país y tal vez algún día compartir el gentilicio…! 

Un buen día para comenzar...

Si, somos otros 3 seres humanos deseando emigrar de Venezuela a un sitio que nos ofrezca mejores oportunidades.

Nosotros 3 en Hyde Park, Sydney. Mayo 2.010

Si, soy otra más que decide abrir un blog para echar el cuento de sus vivencias durante este camino.

***

La verdad, he querido irme de Venezuela, bien fuera por un tiempo o para siempre, desde 1.998. Lamentablemente, y esto puede sonar muy feo, nunca me he sentido identificada con la idiosincrasia venezolana por muchas cosas que sería una raya más pal tigre. Ese año, obtuve mi título de Bachiller y moría por irme de casa, así fuera a estudiar a Mérida o a Puerto La Cruz, pero mi papá muy sabiamente se negó.

El mismo año fueron las desgraciadas elecciones presidenciales en las que el Señor de verruga y boina roja que cometió un golpe de Estado en el año 92 en Venezuela con una cifra lamentable de muertes inocentes y una violencia loca, ganó la silla. Eso para mi fue un golpe muy duro y comencé a tratar de convencer a mi padre de que obtuviera su nacionalidad española para yo poder tenerla e irme cuanto antes. Lamentablemente, para ese momento y hasta el 2.004 más o menos le duró a mi papá su amor por la nacionalidad venezolana.

Durante mis estudios universitarios, comencé a averiguar sobre cursos de inglés, especialmente en Canadá e Inglaterra, pero estaban muy costosos y decidí dejarlo para cuando me graduara… total, mi sueño era ser una hippie errante por toda Europa. Peeero… el último año de universidad me llegó un regalito a la panza y mis planes de hippie terminaron. Pero no mi sueño de vivir en otro sitio.

En el año 2.004, con mucha presión y harta de las locuras del Emperador de la verruga, a lo loco agarré mis 4 trapos y mi bebé y me fui a Barcelona, España a probar. Justo al llegar, el amigo ZP cambió la ley migratoria y me fregaron. No entraba en la legalización masiva y en los 6 meses que estuve, no pude conseguir un trabajo decente gracias a la cacería que tenían en contra de los empleadores. Me regresé con mi rabo entre las piernas. Una depresión me atacó por las siguientes 3 semanas y de paso un pordiosero me asaltó con una engrapadora… No se burlen sin antes figurarse un monte con las matas sin cortar por mucho tiempo y un jalón por la nalga. Lo primero que pensé fue “me violaron” así que ni le paré a la engrapadora, solté todo y me fui corriendo!

Durante estos 6 meses, fue que mi papá tuvo la gran idea de procesar su nacionalidad española y así fue a visitarme. Cuando fui con su pasaporte a pedir los requisitos, ya no podía obtenerla porque era mayor de edad y nacida en Venezuela. Ese fue otro motivo para estar deprimida 1 mes más.

En medio de la depre, conocí a mi actual esposo, el cual me caía mal! Pero bueno, así es la vida. Lo bueno de nosotros, es que tenemos las mismas metas.

 1 año después de estar juntos, a finales de 2.006 aplicamos a unos empleos de El Corte Ingles y por estar sobrecalificados, no pasamos.

Ya cansados de tanto rechazo y con el tiempo – y Chiave- en contra, decidimos sentarnos y ver nuestras posibilidades. Así nació nuestro proyecto al cual yo nombré: El Lado B del Planeta.

Bienvenidos a mi blog!! Espero que disfruten de las anécdotas de una hippie trasnochada y su familia buscando una mejor vida!