Estos muñecos se cambiaron de vitrina

Un post medio vacío, pero que me divierte... :)

En el avión de Santiago a Auckland, veníamos rodeados de gigantes... Y yo sintiendo aquella compasión por ellos. Los pobres no cabían en ninguno de los asientos, ni siquiera en los que no tienen asiento adelante y para colmo el avión venía FULL.

Unos días antes del viaje me dispuse a revisar mi itinerario y a confirmar la hora de salida de los vuelos en la página web de cada aerolínea así como el tiempo de vuelo de cada uno, para tenerlo lo más claro posible y estar mentalizada acerca de cuántas horas estaría viendo TV. Esto es algo importante que se debe hacer, pues los vuelos están constantemente teniendo cambios de horarios, en especial los de aquellos países que tienen 4 estaciones, pues suelen cambiar su hora dependiendo de si es verano o invierno. También pueden ocurrir cancelaciones y créanme que la aerolínea no los va a llamar para avisarles. 

En fin, haciendo esa revisión, noté que mi vuelo de Auckland a Melbourne estaba en mi boleto con hora de  06.05 y de llegada 08.15, pero resulta que el vuelo cambió de hora y ahora salía a las 06.50 y llegaba a las 09.10, siendo mi vuelo de Melbourne a Adelaide a las 10.10. Todo lindo hasta que recordé que, como Melbourne era el primer punto que tocaba en AU, tendría que: Pasar por migraciones, que según la experiencia de Rod, era rapidito; pasar a la zona de equipaje y esperar a que comenzzaran a bajar las maletas, rezando por que las mías estuviesen cerca; y... lo más lindo de todo: tendría que bajar las 8 maletas (LÉASE 8), salir del terminal internacional y dirigirme al nacional con mis OCHO MALETAS y dejarlas en el counter de Qantas, pasar por control de seguridad e ir a la puerta de embarque el último vuelo. Todo eso en... 1 hora. Ya me parecía imposible, pero aún tenía esperanza.

Llegando a Auckland hablé con un Qantero y aseguró que daría tiempo... Si él lo dice, todo será perfecto. Llegamos a Melbourne, hicimos migraciones en 2 minutos y pasamos a la correa de equipaje, donde inmediatamente empezaron a salir las maletas y si, las mías estaban de primeras. "JC, agarra un carrito y yo agarro otro"... Los carritos para llevar las maletas muy chéveres, pero quién le dijo al que los creó que el sistemita de apretar el asa para que rueden es bueno????? Y ahora... a bajar 8 maletas. Gracias a Dios había un señor australiano muy amable que me echó una mano al bajarlas, pero luego fue que vino el circo: maleta que montaba en cualquier carrito, maleta que se iba al piso. Y la volvía a montar y rodaba un milímetro y ploff!! pal piso. Y la que más se cayó cuál fue? la que llevaba .... VIIIIDRIIOOOOO!! Muy bien, 20 puntos. En eso estuve... mínimo media hora y el pobre JC tratando de empujar su carrito y yo más atrás, más el gentío atravesado en el área  más la cola para salir del internacional... El señor australiano me ayudó cuanto pudo, pero la verdad los carritos no soportaban 4 maletas como esas cada uno. La lógica asiática llegó y las acomodó de una manera que no se volvieron a caer y así entonces pudimos avanzar a la salida, sorteando el camino y casi que gritando QUIIITENSEEEE!!! (Un venezolano eswtuvo de testigo, menos mal no tengo problemas con hacer el ridículo). 

Ya fuera del terminal internacional, a buscar el camino al nacional; todo esta muy bien indicado, por lo que conseguimos rápido las rampas eléctricas. 2 carritos, cada uno con 4 malestas con bastante peso. Nos montamos en nuestra rampita, yo adelante y JC siguiéndome. "JC, cuando lleguemos al final, aprieta el asa para que el carrito ruede y no nos quedemos trancados"... Oh si, aunque apreté, esta muñeca no logró mover el carrito un centímetro y qué sucedió? SE CAYERON TOOOODAS LAS MALETAS!!! y atrás venía JC y fueron segundos de desesperación, que mi hijo no secayera y hubiera un accidente en Melbourne. Gracias a Dios un muchacho vio gtodo  corrió a apagar la rampa, de paso subió y me ayudó con JC y hasta me ofreció ayudarme con los carritos, pero yo decentemente (y boba autosuficiente) dije no. Luego de volveeerrrr a montaaaaarrrr toooodas las maleeetas en el carrito, empezamos a caminar sin rumbo, pues no veíamos los counters de Qantas y cada vez que preguntaba me decían "siga derecho". Y seguimos y seguimos derecho hasta que vimos un puertecita al final que decía "domestic flights". FINALLY! Como pudimos apresuramos el paso y llegamos al counter de Qantas, uno de como 25 que había y todos vacíos jejeje... qué gracioso ver eso. El chico que nos atendió me dice "Podrían conectar pero el problema es que ya no da tiempo de montar las maletas. Pero no hay problema! los ponemos para el próximo vuelo y listo!"... Y así fue. Impresión de nuevo boarding pass, impresión de nuevos tickets para las maletas y nuestro nuevo vuelo, sin penalidad alguna (cosa que no sucede en Venezuela, todavía no entiendo por qué) era a las 12.10.

MORALEJA: Revisen su itinerario con tiempo y si ven que un horario cambió y no les conviene en la conexión, llamen a la aerolínea y cambienlo! aunque no se presentan problemas para que te reubiquen en el próximo vuelo, uno siempre quiere llegar lo más rápido posible, especialmente después de uan ruta tan larga.

Al llegar a Adelaide me sorprendió algo: Las correas para recoger las maletas no estan antes de salir al lobby del aeropuerto... no. Estan EN el lobby del aeropuerto, es decir, después de que pasas la puerta de la zona de llegadas y solo te falta pasar otra puerta para respirar el are de la ciudad? Bueno, ahí estan las correas para recoger el equipaje... Lo primero que me vino a la mente: Aquí como que no roban!

Del aeropuerto a nuestra casa, solo 10 minutos y como lo dicho, aquí esta el video que, como les dije a algunos ya, me quedó chimbo pero Ej lo quihay...! Les presento  la nueva vitrina de estos muñecos!

Este mismo día fuimos a comprar un comedor y como vimos una ofertica de 700$ por un juego de muebles de 2 y 3 puestos, pues no la pelamos... Así que ya comenzamos a darle forma a nuestro espacio temporal!