Pre-Partida número 1

Nos quedaban solo 6 meses para preparar todo para que el muchacho se fuera completo... Y si, digo SOLO 6 meses. Hasta ahora la experiencia (que la sigo viviendo) me ha enseñado que hay que planificarse con tiempo y 6 meses es una buena medida pero en serio... PLANIFÍQUENSE!

A mi parecer, nosotros nos tomamos las cosas con demasiada soda, además de que las circunstancias ameritaban ciertas decisiones que nos apretaban el tiempo. Sin embargo tuvimos suerte, pues gracias a que nosotros no tenemos absolutamente nada en este país, más allá de un carro, unas consolas de videojuegos, un DVD USB que serían las cosas "vendibles" y además no tenemos corotos que necesiten un envío internacional en containers, las cosas no se nos complicaron.

Al comprar el boleto, empezamos a buscar las 3 maletas que le faltaban y aprovechamos de comprar como 4 más para que cuando me tocara, ya las tuviera. Luego, Rod empezó a empacar con aproximadamente 4 meses de antelación, metiendo cuanta cosa se encontraba en su cuarto que le gustara, que le trajera un mínimo recuerdo o que le pareciera lo mínimamente útil... (...) Pero no se hizo más que esto. Como habrán leído antes, Rod había cambiado de empleo en Octubre 2.010 y para no quedar "tan" mal como pensábamos que quedaría, decidió extender su preaviso hasta 15 días antes de su partida... O_o. La suerte? En su nuevo empleo no fue que lo amaron, no... LO ADORARON. Todavía hoy respiran su nombre cual suspiro de amor y cuando avisó que se iba, en vez de molestarse y verlo mal, se pusieron tristes... sin exagerar, algunos lloraron. El jefe mayor le ofreció en algún momento pagarle el pasaje para que se quedara... JA!

Luego nuestra mayor preocupación era adónde llegar. El gobierno de South Australia, hasta Octubre del año pasado, ofrecía una opción de alojamiento temporal en unas casas del gobierno, en las cuales pagabas menos de lo que se paga normalmente por un alquiler. Allí un inmigrante podia quedarse durante 3 meses hasta conseguir algo para mudarse. Pero, lamentablemente ese servició falleció y ahora los que nos vamos tenemos que buscar la opción menos cara para llegar y quedarnos mientras nos establecemos. Pues bien... conocidos asi como para pedirles alojamiento en su casa... no teníamos. Muchos contactos en el sitio pero nadie con la suficiente confianza. Pero un día recibí unos correos en FB del grupo Venezolanos en Adelaide sobre colegios en SA y le dí las gracias a la persona que los envió, quien es uno de los moderadores del grupo y por ahí comenzamos a conversar sobre fotografía, luego sobre Australia y por no dejar le comenté sobre nuestra búsqueda y le pedí que si llegaba a escuchar sobre algún alquiler de habitación, se acordara de nosotros. 

Particularmente lo hice por probar, sin embargo pensé que como siempre sería difícil que esa acción tuviera algún efecto, pero GRACIAS A DIOS me equivoqué! En un par de semanas, el moderador vuelve a hablarme por FB para decirme que un muchacho maracucho (si, me persiguen) estaba mudándose solo a un unit y no tendría inconvenientes en alquilarle una habitación a Rod...!  Acto seguido Rod se pone en contacto con dicho muchacho, quien en poco tiempo le hizo saber cuánto le cobraría (la mitad de lo que cobran por una habitación y además con todo incluido, hasta internet!) y hasta le ofreció ir a buscarlo al aeropuerto! Mejor imposible! Sin necesidad de referencias, pagando la mitad, con todo incluido y hasta transporte!! Lo único que pedía a Dios es que no fuera un psicópata.

Entonces... Resulta ser que los grupos en FB de Venezolanos si tienen un peso cuando se trata de pedir asistencias o hacer contactos. Mi recomendación es buscarlos y meterse YA.

1 mes antes de su partida, Rod perdió la cordura. De ser un tipo controlado y tranquilo, pasó a ser aquel que no se pelaba una rumba ni un viaje. Ese mes fue realmente... sorpresivo para mi. La mezcla de emociones de él junto con las mías no dieron un buen resultado. Nunca pensé que reaccionaría de esa manera, siempre estuvo tan tranquilo y de pronto explotaron todos esos miedos y salieron a través de actitudes intransigentes y egoístas y a mi no me quedó más que "calarmela"... a MUY duras penas. 

Así que mujeres y hombres, los viajecitos estos pueden provocar que el Alter Ego de tu pareja salga a flote y te lleves una grata -o no tanto- sorpresa.

Obviamente yo quería pasar el mayor tiempo con él pero las cosas se dieron de otro modo. Sus compañeros de trabajo cada viernes de ese último mes se inventaron una fiesta de despedida y luego un viaje a Margarita... Bastante triste para mi, pues en Carnavales había hecho el sorteo con mis compañeras de trabajo y me había tocado trabajar en Semana Santa. Al menos tuve el chance de organizarle una choripanada de despedida, a lo cual invité a más o menos 35 personas y solo fueron... 9, por lo que mi siguiente consejo será:  No se esfuercen en querer despedirse de todo el mundo... el que quiere verte antes de que te vayas, hará lo posible por hacerlo, conseguirá el tiempo para visitarte. 

El suegrastro y JC haciendo los choripanes

Los asistentes

15 días antes de su partida, terminó de trabajar y fue cuando notó que la semana siguiente era Semana Santa... Es decir, una semana menos para resolver diligencias. Resultado? Apuro la última semana y otras que no se hicieron. Al menos pudo ir a los médicos que tenía que ir y vendió el carro, pero su cuarto... su cuarto quedó como si nunca se hubiera ido. Yo solo sigo compadeciendo a mi suegra, pues Rod es de los que almacena cosas, cables, aparatos viejos, papeles y papeles, periódicos históricos, etc... el polvero en su cuarto y el perolero, no es normal. Siempre he dicho que si yo me muero primero, el pobre de va a morir como los acumuladores que pasan en Discovery HH xD. Y por último pero no menos importante, dejó el closet repleto de cosas para donar. Conclusión: El muchacho dejó un perolero tirado ahi que mi suegra, aunque Rod haya dejado instrucciones de botar y donar, aún no halla por dónde empezar. 

El fin de semana antes de su partida... ya empezaron las caras largas y los lagrimones que se mantuvieron ocultas en las caras de la familia. Nos distrajo por un buen rato un chupe hecho en casa, unos pies de chocolate y manzana hechos por mi cuñada menor y la ayuda necesaria para Rod para terminar de cuadrar sus 4 maletas. Como era de esperarse, el perolero que había metido (que incluía la barra para hacer paralelas en el cuarto, un reloj despertador Sony de los años 80 y un sombrero de cotillón (?)) hacían que 2 de las 4 maletas se pasaran del peso permitido... así que a sacar, pesar, meter, pesar y asi durante un par de horas, pretendiendo [el que lo que quedara, me lo llevara yo... YA VEREMOS!!! cuando terminamos fue que las lágrimas y las fotos aparecieron. 

El chupe del suegrastro

Los pies de la cuñada menor

Armando las pinches maletas

Cuadrándolas pa ver cómo podría llevarlas en caso de que tenga que bajarlas en Chile

Probando si el plan funcionó

Last pic in famly... for now.

La gente no entendía por qué yo me sentía triste y por qué yo también lloraba... si yo también me voy! Si... también me voy. Pero tenía por el medio 4 meses de separación que para ambos serían un poco duros. 

Esa noche, no dormí. A cada rato me paraba, lagrimeaba un rato y volvía a acostarme. 

Una psicópata le tomó una foto el 2 de Mayo mientras dormía

Solo una noche más y ya le tocaba irse...!